Malala Yousafzai, una estudiante de 14 años, se ha convertido
en un símbolo de la lucha por el derecho a la educación de las niñas. Malala,
que vive en el valle del Swat, en Pakistán, fue tiroteada por los talibanes
hace dos semanas por defender públicamente ese derecho.
Su padre y otros miembros de su familia llegaron este jueves a
Reino Unido para visitarla y ayudarla en su recuperación. "Para nosotros
es un milagro (...) estaba en unas condiciones muy malas", ha reconocido
en declaraciones recogidas por la agencia Reuters. "Querían matarla. Pero
solo se ha caído durante un tiempo. Volverá a levantarse, volverá a
defenderse", ha asegurado el padre con la voz quebrada.
El pasado 15 de octubre la joven fue traslada al Reino Unido,
donde ahora se recupera de sus heridas en un hospital de Birmingham. Días
después de su ingreso, los médicos que la atienden se mostraban impresionados
"por su fortaleza y su entereza".
Me parece muy bien que Malala se esté recuperando y si es un buen blog.
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